Se abrió este día 15 con la Fiesta de Santa Teresa. La oración de laudes  nos introdujo en lo que es ser una persona mística, como síntesis entre lo humano y lo divino.

Para empezar el trabajo del día las hermanas de la vice-provincia África nos ambientaron la oración con una tradición africana, en la que el anuncio de acontecimientos importantes es realizado al son del tam-tam por pregoneros cualificados, los “Griot”. Ellas nos proclamaron ante la imagen de Vicenta María la necesidad de ahondar en nuestro ser RMI hoy. Cerró esta introducción  un canto oracional en francés al Espíritu Santo.

Así iniciamos hoy la sesión deliberativa, en la que estuvo centrado todo el trabajo de esta jornada: reflexión y discernimiento, diálogo en comunidades, búsqueda de puntos importantes, “raíces” y temas a partir del documento de trabajo.

En la Eucaristía como culmen del día, el celebrante nos recordó que la puerta de toda renovación es la oración.